PADISBOL 
 Asociación de Padres y Amigos de las Personas con Discapacidad en Bolaños. 
         PADISBOL
Asociación de Padres y Amigos de las Personas con Discapacidad en Bolaños.
PADISBOL
Asociación de Padres y Amigos de las Personas con Discapacidad en Bolaños.

Historia 12: "EL MISTERIO DE LAS PIRÁMIDES EGIPCIAS"

"El misterio de las pirámides egipcias"
Hace bastantes años los habitantes de las poblaciones egipcias pensaban en pasar hasta una de las pirámides para poder saber lo que se encontraba dentro.
Buscaban y buscaban la forma de acceder hasta una de ellas y una vez encontraron un pequeño lugar que les permitía pasar a su interior. 

Uno de lo más valientes se ofreció para pasar hasta la misma, pero una vez dentro se quedó inmovilizado. El resto de habitantes lo sacó a toda prisa y una vez fuera preguntaron si había otro valiente dispuesto a entrar. Otro de los hombres se ofreció voluntario, sin embargo, al igual que el primero no tardó en quedar inmóvil.

Tras lo sucedido, pensaron que los egipcios dueños de la pirámide no querían que se accediese hasta ella y tenían algo puesto para no permitir la entrada. Así, decidieron contactar con los investigadores para poder saber a qué se debía todo esto.

Después de largos días de investigación y de coger una muestra de lo que allí se encontraba, llegaron a la conclusión de que lo que ocurría era que cuando los hombres intentaban pasar por ese pequeño hueco las heces de los murciélagos depositadas en el suelo producían una especie de vapor que provocaba esa inmovilización a las personas que intentaban pasar a la pirámide.

Tras conocer esta información, pensaron en ahuyentar a estos murciélagos. 
Una vez que estos se hubiesen marchado limpiarían las heces y, de esta forma, podrían pasar tranquilos y sin temor a que les pudiese ocurrir nada. 
Una vez que estaba todo limpio, pudieron acceder a ella y una vez dentro pudieron ver cosas nunca imaginadas. 
Aun así, estos no se fiaban mucho por si se encontraban alguna trampa y trataron de ser lo más precavidos posible por si en un caso les llegase a pasar algo que no quisieran.  

Tras mucho andar, pasaron a una especie de habitación en la que se encontraba un sarcófago y pensaron que se trataba de la momia del gran faraón egipcio Tutankamón. 
Este sarcófago se encontraba rodeado de muchas monedas de oro y uno de los habitantes sugirió recogerlas, pero el resto tenía miedo porque habían visto todas las trampas que los egipcios ponían. 
Además, al tratarse de donde presuntamente se encontraba el faraón era de suponer que las trampas serían aún mayores.
Por tanto, decidieron buscar otra forma para poder recoger esa riqueza y evitar males mayores. 

Después de un tiempo pensando cómo hacerlo, llegaron al acuerdo de ponerse unas especies de vestimentas especiales que les protegería contra las trampas. 

Poco a poco se fueron acercando al sarcófago y, como bien habían imaginado, se encontraron alguna trampa que disparaba flechas. No obstante, gracias a sus vestimentas especiales no les pudieron llegar a hacer nada.

Una vez se encontraban pegados al sarcófago comenzó a ocurrir algo muy malo. De repente, empezaron a crearse unas especies de barrancos con mucha agua y dentro se encontraban cocodrilos y otros animales salvajes, como si de una película fantástica se tratase. 
De esta forma, no les quedó más remedio que retroceder y buscar la manera de pasar al otro lado del barranco.

A uno de ellos se le ocurrió que tal vez podrían construir un puente para pasar al otro lado. 
Tras mucho esfuerzo y constancia terminaron la construcción y pudieron pasar sin ningún problema para recoger todas las monedas de oro. 

Una vez que las tuvieron en la mano se pusieron muy contentos, pero los demás estaban preocupados porque pensaban que igual que les había costado entrar ahora les costaría mucho salir. 
Con temor y cuidadosamente se acercaron hasta la salida de la pirámide, encontrándose muchos obstáculos, pero consiguiendo esquivarlos y salir al exterior. 

Una vez fuera de la pirámide mostraron gran alegría, estaban seguros de haber hecho lo adecuado. Aun así, pensaban que habían expuesto su vida, pero que si no hubiese sido por eso no podrían haber sacado todo eso que tenía un valor incalculable. 
Así, todos se abrazaron y se sintieron orgullosos porque gracias a su valentía consiguieron estas monedas de oro. 



REFLEXIÓN:
Podemos ver que para conseguir lo que uno quiere hay que esforzarse, aunque el esfuerzo no siempre garantiza la recompensa. 
Hay que ser constante, trabajar en equipo y tratar de alcanzar nuestras metas.


FIN
Share by: